¿Qué hace en vacaciones un aspirante a Guardia Civil y bailarín de un grupo? Sofocar los hasta cuarenta grados de temperatura que se sufren en Córdoba jugando con más de 200 pequeños en las instalaciones municipales de Cerro Muriano. Alejandro Sánchez cambia el tricornio por unas orejas de «Shrek» durante el verano. Fue en campamentos religiosos donde descubrió que trabajar con niños es el motor que le da energía para opositar el resto del año a Guardia Civil.
-¿Cómo pasa el verano un monitor de tiempo libre? -Pues viviendo prácticamente en las instalaciones de Cerro Muriano y escapándome a la playa cuando puedo. Durante el campamento me olvido del día en el que vivo; empiezo el día 1 y acabo el día 9, con actividades las veinticuatro horas del día. Llevo cuatro años sin tener noción del tiempo durante julio y agosto.
-¿Por qué dedica su vacaciones a estar con los pequeños? -Porque el trabajo con los niños es algo reconfortante. El poder trabajar y que te paguen por jugar a ser niño es algo muy valioso. Esto para mí es un hobby, un juego, porque el dinero que recibo es simbólico. Además, desde pequeño he participado en campamentos.
-¿Qué hace el resto del año? -Hace unas semanas me presenté al examen de Guardia Civil, pero suspendí las pruebas psicológicas. Lo volveré a intentar en diciembre. Además, trabajo en el grupo de baile «Rumba Bravos».
-Entonces, ¿sigue con los acampados una estricta disciplina propia de la Benemérita? -No, esto es una vida paralela en la que eres alguien diferente a quien eres en tu vida real: aquí voy con unos cuernos de Shrek y en la calle me tomarían por un loco.
-Pero, ¿no son mundos demasiado distintos: el baile, la Benemérita y el ocio infantil? -No, son trabajos muy parecidos porque en el campamento bailas y te diviertes con los pequeños a la vez que les dedicas tu tiempo, les ayudas. La Guardia Civil también ayuda a quien tiene un accidente, por ejemplo, no es siempre una figura sancionadora. Me gustan ambas cosas porque es reconfortante sentirte útil.
-Y para terminar, ¿se plantea un verano distinto al de sus últimos cuatro años? -No, repetiría. Aunque te quite tiempo de sueño, de descanso, de estar con tu familia, pero te llevas para Córdoba la amistad de más de 200 chavales por cada 9 días. Lo único que cambiaría es que en lugar de Cerro Muriano, los campamentos fueran en la playa.